Es fundamental en estas etapas de la vida un buen asesoramiento psicológico para solucionar y ayudar a superar problemas en los más jóvenes. La evolución de cualquier problemática en este periodo está ligada a una detección e intervención temprana.
Entre los áreas que tratamos podemos destacar: fracaso escolar y trastornos de aprendizaje, ansiedad y miedos, trastorno por déficit de atención e hiperactividad, problemas de conducta, trastornos del sueño y la alimentación, autoestima, la depresión en el niño y problemas del adolescente.